miércoles, octubre 17, 2007

CAMARETAS CLASICA

Hace algunos años que hacemos varios intentos de arrancar una cita clásica de excursión con las viejas trialeras. Por diferentes circunstancias nunca lo consolidamos, hasta esta fiesta del Pilar, donde se juntaron los duendes y las ganas para dejar la primera piedra de un largo futuro de citas.

Nos vemos el viernes, para ir desempolvando las reliquias y prepararnos para las viejas glorias, me comentó Juan Quintana, que Bruno Guerra estaba animado e igual convencía a Nino Perera. Casualmente Coke pasaba por el taller y le dije que se uniera a nosotros, que lo habíamos decidido sobre la marcha.

El viernes 12 de Octubre, fiesta del Pilar amaneció en el Rincón viejas glorias de Valsequillo, un día esplendido, como anticipo y regalo de la excursión que nos esperaba.

La Bultaco Sherpa luce la mirada cariñosa del tiempo. A estas alturas el mimo con que tratamos a nuestras trialeras de antaño, nos hace felices y agradecidos de conservarlas.
Patadón y sonidos de los setenta, calentamiento, giros, frenos, presiones, gasolina, y el macuto preparado. Por la misma calle se oyen hermanas gemelas contagiadas del mismo sonido, es la llamada al encuentro y al paseo matutino.

Saludos, sonrisas y nos vamos, que la mañana nos espera, despedimos a Miguel que corría haciendo mandados al padre y en cuyas retinas de niño, quedará para siempre grabado el entusiasmo con que los viejitos salen a trialear con motos míticas.

Nada mejor ruta para una clásica, que volver por las sendas de entonces, caminos de herradura antiguos que llevan toda la vida comunicando los pueblos, cruzar el barranco de San Miguel y subir el Helechal. Autopista en nuestro argot. Dicha buena senda, une el municipio de Valsequillo con San Mateo. Y sube desde el colmenar bajo, pasando por el pueblo y enfilando hacia la base del mirador del mismo nombre.

Las motos; Cuatro Bultacos y una Fantic 300 Replica Saturnino Perera. esta novedad que no entra dentro de los parámetros de fabricación original. Entra en las evoluciones de mejoras particulares que le ha hecho nuestro hombre. Un consolidado trialero de los años setenta. Lider de muchos campeonatos y campeón de España de Clásicas de trial en el primer campeonato convocado en el 2000.

Nuestros otros espadachines: Bruno Guerra un ilustre piloto de la década prodigiosa también, conjunto con Jorge Gómez un veterano activo y en la era más moderna años 80. Juan Quintana y el que suscribe.

La primera moto rebelde fue la de Bruno, no carburaba e iba ahogada todo el camino. La primera parada obligada es en el Lomo La Vega, parte alta del Helechal, cuyas vistas son para disfrutar en una mañana tan agradable. Croquis de situación, fotos panorámicas y un poco de agua para continuar. Nos vamos a San Mateo, continuamos subiendo hasta el Pico Sardina y bajamos el tramo trialero de La Higuerilla para continuar por atajos hacia el Calero y la Lechuza.

Habían tramos del camino de autentica Jungla de Zarzas, que ya se encargaron de dejarnos huellas, magulladuras y soltar tacos, de agradecimientos.

Pasando La Lechuza, encontramos nuevamente el camino de Siete fuentes, precioso y empinado, después del volcán de Troya, por la cresta de los pinos jugueteando con las “viejitas” y probando hacer el héroe de los setenta. Sanmy Miller, Martín Lampkin, O el mismísimo Manuel Soler.

En la Montaña de Camaretas, nos esperaba el reto de la mañana. La pendiente alcanza los 80º grados por zonas, toda la cresta es de “Picón” amarillo, Y salirse de la huella de los endureros o trialeros de toda la vida, te puede costar un lío en medio de la pinocha, lo más prudente es dar la vuelta y empezar de nuevo. De lo contrario, tú sabrás.

Fue aquí donde el bultaco Sherpa de Bruno hizo una cabriola y cayó rompiendo el manillar. Remiendos a la antigua usanza, con media rama de tronco de pino, y un puñado de cintillos de colores. Al final continuó de aquella manera. El mediodía estaba listo y lo mejor es buscar un rincón donde refrescar con unas cervezas la alegre y clásica mañana.

Entonces descubrimos que la nueva Asociación de Vecinos de Camaretas en medio del pinar. Estaba en fiestas, sus primeras fiestas oficiales y pensamos que era buena suerte ser los primeros allegados a la cita festiva, unos rones blancos y unas latas de tropical nos dejó a gusto para entablar conversaciones con los locales, y conocer a maestro Pedro que nos sirvió de padrino improvisado para la primera piedra de este encuentro de Clásicas Camaretas.

Los detalles, os lo imagináis, lo cierto es que al final, desandamos el camino por la parte buena, para evitar el suplicios con la moto de Bruno. Y de paso, se nos jodió la Bultaco que llevaba yo, se soltaron los tornillos del piñón trasero e hizo un pequeño destrozo. Nada que no se pudiera solucionar, rebuscando en las mochilas de viejas glorias.

Al final, fue el Guajára y el rincón viejas glorias, quien dio cuenta de las vicisitudes del día, que sin apenas desearlo se nos presentó como ideal para institucionalizarlo como apéndice de la gran fiesta canaria anual. Por ello hemos querido dejar constancia con nombre propio y carácter clásico.- I Camaretas Clásica, ha nacido un nuevo encuentro con sabor a reserva. Te esperamos en la próxima cita.