Paraje Natural de Pilancones

En la década de los noventa moverse con motos de trial por la isla, era una tolerancia más permisiva, no había una reglamentación exclusiva de espacios con protección especial y el reto de ir descubriendo las vertientes, los grandes barrancos y cordilleras se convirtió en una brillante iniciativa que nos dejó gratos recuerdos y un interés especial por conocer la realidad geográfica de este continente en miniatura.

El gran Sur permanecía ausente casi desconocido para las mayorías, tan solo podíamos interpretar a los cazadores como deportistas que más se integraban en esos descubrimientos del terreno, aun se conservaban intactos muchos caminos rurales que conectaban municipios de medianías y cumbres, rutas de mar a montaña con el consiguiente estado de conservación y abandono de toda actividad agrícola y ganadera en el interior.

Tan solo pequeños núcleos aislados, se sostenían al amparo de sus ancianos y pequeños agricultores de pedazos de tierras, con plantas frutales y caserones de campo esparcidos. En esta visita queremos hacer un breve paseo por el interior de uno de los grandes desconocidos parques naturales, El circo montañoso de Pilancones controlado por el Cabildo de Gran Canaria con un Aula de la naturaleza en su interior y las Heredades de aguas del barranco de Ayagaure, cuya zona Alta de pinares linda con San Bartolomé de Tirajana, municipio al que pertenece todo el parque natural, casi 5800 hectáreas a la derecha fataga y a la izquierda Cercados de Araña.